Una mezcladora sirve para homogeneizar dos o más ingredientes, que pueden ser líquidos o sólidos, y obtener emulsiones uniformes. Son necesarias también para la hidratación de gomas, espesantes y estabilizantes.
La potencia con la que funcionan estos equipos nos permitirá obtener productos de diversas texturas o grados de homogeneización: productos granulados, productos en polvo, ...