Zumos
Bebidas alcohólicas
Refrescos y agua
Lácteos
La industria de los zumos, bebidas y lácteos ha ido evolucionando de acuerdo a los gustos y las necesidades de los consumidores. Todo ello gracias a los diferentes avances tecnológicos en maquinaria que lo han hecho posible.
Esta industria se encuentra muy fragmentada debido al gran número de fabricantes a nivel mundial, diferentes formatos de envasado/embotellado y la diversidad de los productos finales:
Zumos, elaborados a partir del prensado del líquido natural contenido en frutas y vegetales.
Aunque el proceso varía en función del tipo de frutas que se empleen, todas tienen etapas de elaboración comunes. De acuerdo a su composición y fabricación podemos destacar el zumo de fruta, concentrado y néctar.
Refrescos carbonatados y bebidas energéticas, que contienen agua, edulcorantes y saborizantes naturales y/o artificiales.
Agua y bebidas isotónicas, con gran capacidad de rehidratación.
Los batidos o smothies, una mezcla de frutas frescas trituradas con hielo a la que se le suelen añadir variedad de ingredientes o toppings.
Bebidas fermentadas, como el vino, que emplea uva prensada, y, la cerveza, que utiliza lúpulo y cebada o trigo.
Bebidas destiladas. Agrupan a la mayoría de las bebidas alcohólicas que superen los 20° de carga alcohólica. Entre ellas se encuentran bebidas de muy variadas características, y que van desde los diferentes tipos de brandy y licor, hasta los de whisky, anís, tequila, ron, vodka, y ginebra entre otras.
Lácteos, que dependiendo de su formato y características podemos distinguir entre preparados lácteos (leche con más ingredientes), yogures, leches fermentadas, postres lácteos, helados, cuajadas, quesos y mantequilla.